Los niños nacen con alas, los profesores deben enseñarles a volar.


jueves, 24 de marzo de 2011

la crisis llega a la educación

Al final siempre pasa lo mismo, la educación y la sanidad siempre son los primeros en sufrir recortes. Olvidamos la importancia que tiene la educación en la sociedad.... O quizás no lo hagan. Un pueblo instruido es más difícil de manejar y engañar. La educación siempre está degradada... sobre todo la primaria y, por encima de todos, la infantil. 

En septiembre, el ministerio de Educación y las Comunidades Autónomas acordaron invertir más de mil millones de euros, a partes iguales, para desarrollar 17 programas educativos estratégicos. Ahora la crisis económica y el ajuste presupuestario dejan seriamente tocado el plan al forzar al ministerio a renunciar al modelo de cofinanciación, es decir, ya no exigirá como condición a las autonomías que asuman la mitad de los gastos.
Según el ministro Angel Gabilondo "se han tenido en cuenta las condiciones especiales en las que estamos, en un contexto de déficit y de control de la deuda". Por su parte las comunidades autónomas han recibido "con alivio" esa "flexibilización" en la aplicación del plan ya que, como ha explicado la consejera madrileña, Lucía Figar, "es un respiro no tener que poner sobre la mesa unos millones que sencillamente no tenemos".
Educación sí aportará los 510 millones comprometidos por el gobierno central pero la otra mitad queda en el aire supeditada a lo que decida cada comunidad. Sobre el papel, podría recortarse hasa en un 50 por ciento el dinero previsto para construir escuelas infantiles, luchar contra el fracaso escolar, implantar portátiles y pizarras digitales en las aulas o potenciar el aprendizaje de idiomas.
El ministerio señala que, aunque no se va a exigir como condición ninguna aportación mínima de financiación, los fondos que reparta el ministerio se articularán mediante la firma de convenios, deberán ir destinados inequívocamente a los programas establecidos y no a otros, y además deberán ir acompañados de una rendición de cuentas.
http://www.cadenaser.com/internacional/articulo/crisis-deja-tocado-plan-educacion/csrcsrpor/20110323csrcsrint_13/Tes

domingo, 6 de febrero de 2011

el futuro...

Comencé este blog, como la mayoría de vosotros, por la asignatura de Pedagogía (otros lo hicistéis por educación social). Os deseo a todos mucha suerte en los exámenes (de esta asignatura y de las demás). Ha sido sólo un trimestre duro (después de varios años sin estudiar es duro ponerse con la UNED) pero gracias al foro, a este blog, a los vuestros... Ha pasado mucho más rápido, mucho mejor.
Terminó el trimestre (yo aún no he hecho el examen, pero bueno...) y me he planteado qué hacer con este blog. Y he llegado a la conclusión de que quiero continuarlo. Y quiero tomármelo "más en serio". Creo que es una manera estupenda de desarrollar mis pensamientos y compartirlos. Y que vosotros los compartáis conmigo... Así que espero seguir viendos navegando por aqui. Compartiendo vuestras ideas y sueños. Compartiendo los míos. Porque como decía una compañera en el foro de otra asignatura... Nosotros somos los que podemos cambiar la educación tal y como está ahora. Podemos mejorar. Hacerla más como deseamos. No por nosotros, sino por el futuro. 
Dando unas vueltas por internet he encontrado este "chiste". ¿Qué opináis?

miércoles, 12 de enero de 2011

MAL DE ESCUELA

Hoy, quiero poneros un texto de un libro que estoy leyendo. El libro se llama "Mal de escuela" de Daniel Pennac. Empecé con el libro con ganas e ilusión y lo cierto es que enganche. Unas ganas e ilusión que me contagió una profesora de un curso que tuve hace un año... Espero que os guste. A mí me hace reflexionar, pero claro... Es mi vocación.

Nuestros "malos alumnos" (de los que se dice que no tienen porvenir) nunca van solos a la escuela. Lo que entra en clase es una cebolla: unas capas de pesadumbre, de miedo, de inquietud, de rencor, de cólera, de deseos insatisfechos, de furiosas renuncias acumuladas sobre un fondo de vergonzoso pasado, de presente amenazador, de futuro condenado. Miradlos, aquí llegan, con el cuerpo a medio hacer y su familia a cuestas en la mochila. En realidad, la clase solo puede comenzar cuando dejan el fardo en el suelo y la cebolla ha sido pelada. Es difícil de explicar, pero a menudo solo basta una mirada, una palabra amable, una frase de adulto confiado, claro y estable, para disolver esos pesares, aliviar esos espíritus, instalarlos en un presente rigurosamente indicativo.
Naturalmente el beneficio será provisional, la cebolla se recompondrá a la salida y sin duda mañana habrá que empezar de nuevo. Pero enseñar es eso: volver a empezar hasta que nuestra necesaria desaparición como profesor. Si fracasamos en instalar a nuestros alumnos en el presente de indicativo de nuestra clase, si nuestro saber y el gusto de llevarlo a la práctica no arraigan en esos chicos y chicas, en el sentido botánico del término, su existencia se tambaleará sobre los cimientos de una carencia indefinida. Está claro que no habremos sido los únicos en excavar aquellas galerías o en no haber sabido colmarlas, pero esas mujeres y esos hombres habrán pasado uno o más años de su juventud aquí sentados ante nosotros. Y todo un año de escolaridad fastidiado no es cualquier cosa: es la eternidad en un jarro de cristal.

martes, 11 de enero de 2011

Hola a todos,
Lo primero… Feliz año a todos! He estado un poco ausente estos meses por reformas en casa y sin poder meterme en Internet… Es tremendo como en nuestra vida es ya casi fundamental el Internet. Y sólo pensar cómo será en un futuro… Los niños cada vez están más avanzados… Más de lo que pensamos. El año pasado di clases de informática en infantil, desde los tres años hasta los cinco. Y era super curioso como los niños más pequeños cogían bien el ratón y empezaban a utilizarlo a una gran velocidad… Y eso me recuerda una mujer con la que estaba hablando sobre actividades extraescolares, sobre el inglés desde pequeños, etc… y me dijo lo que dicen muchas “cuando seas madre hablaremos”. Es cierto, aún no soy madre, pero sí quiero lo mejor para ellos y no creo que sean incompatibles.
Bicos, ser felices